La gestora de capital riesgo Clave Mayor está preparando el lanzamiento de un nuevo fondo de transferencia de tecnología en el sector de la alimentación. El instrumento se lanza y se gestiona desde la oficina de Clave mayor en Valencia.
La entidad cuenta con el apoyo del ICO, que aportará un 40% de los fondos previstos, que se estiman en 15 millones de euros. Por el momento, ya tiene comprometidos, además de los siete millones de euros, del ICO, otros tres millones de inversores particulares.
El responsable de Clave Mayor en Valencia, Pedro de Álava, explica que se trata de un fondo en el que inviertan compañías medianas del sector agroalimentario, que puedan plantear a los gestores cuáles son sus necesidades en innovación, de manera que el fondo pueda investigar en qué universidades o centros de investigación se pueden desarrollar y, a partir de eso, invertir en patentes o crear empresas para ello.
Las empresas que ya han apostado por el fondo son compañías de este sector, cuya facturación está entre los ochenta y los cien millones de euros, explica De Álava.
Añade que los partícipes podrán tener no solo la rentabilidad obtenida por el fondo, sino también un acceso en prioridad a las tecnologías y desarrollos innovadores impulsados desde el fondo, que además habrán sido planteados por ellos mismos y se ajustarán a lo que estas empresas requieren para su crecimiento.
La gestora apunta que es una inversión con expectativa de rentabilidad financiera, con una tasa interna de rendimiento (TIR) estimada del 18,15 por ciento. La intención es poder realizar un primer cierre del fondo en torno a junio, y otro en octubre.Clave Mayor tiene actualmente cuatro fondos constituidos. Uno de ellos, con la Universidad Politécnica de Valencia, de transferencia de tecnología, de cuatro millones de euros.Además, tiene otro similar con la Universidad de Navarra, de 8,5 millones, otro con la Pública de Navarra y uno más con el grupo Mondragón. En fase de lanzamiento, además del especializado en alimentación, tiene otro con la Junta de Castilla y León.
Fuente: EXPANSIÓN