Inversión food tech, el pez rápido se come al lento

12.09.2021 En: Noticias
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Las nuevas tendencias, unidas a la digitalización y a las mejoras organolépticas, son una oportunidad para el sector

El sector Food Tech vive un momento de cambio que está permitiendo aflorar nuevas compañías que aportan ventajas respecto a los modelos establecidos. La transformación digital que llegó a muchos sectores como las comunicaciones, movilidad, biotecnología, energía… también ha irrumpido en el sector de la alimentación.

Las empresas alimentarias observan cómo las nuevas tendencias unidas a la digitalización y a las mejoras organolépticas son una oportunidad para el sector. Hasta hace pocos años las grandes innovaciones se desarrollaban en las áreas de I+D y marketing, siendo en su mayoría incrementales (formatos) y ampliaciones de gama (nuevos sabores, reducción de azúcar, bio, light…). Ahora el consumidor se siente empoderado, lo quiere TODO, busca un producto sabroso, saludable, sostenible, accesible, seguro y social. Estos requerimientos crecen a una velocidad superior a las capacidades transformación que son capaces de ejecutar las empresas.

Este espacio lo están ocupando startups, que aportan ventajas respecto a los modelos establecidos. Nacen con modelos muy “lean”, casi sin infraestructuras, que operan con costes bajos, y por tanto son más resistentes y flexibles, adaptando continuamente sus modelos de negocio a las necesidades y tendencias del mercado.  

Las grandes corporaciones, atentas a estos movimientos, generaron sus departamento de CORPORATE para atraer todo este talento e innovación. Para las Pymes la partida es más compleja, necesitan de instrumentos que les permitan analizar este contexto de innovación e inversión.

Las empresas que han adoptado modelos de innovación abierta han conseguido atraer a sus organizaciones innovaciones inorgánicas, aportando a sus equipos nuevos modelos de negocio y nuevas ventajas para el producto y el consumidor. La financiación para la realización de I+D siempre ha estado ligada a subvenciones y ayudas públicas, pero ¿cómo abordamos la inversión en Start ups? La aparición de instrumentos financieros de transferencia de tecnología ha permitido reducir este binomio de alto riesgo y alta rentabilidad, desarrollando vehículos que invierten en proyectos incipientes con el objetivo de escalar su modelos de negocio y consolidar su posición de mercado.

En 2019, un grupo de empresas del sector alimentación español, con el apoyo del FondICO, decidieron lanzar TECH TRANSFER AGRIFOOD, un fondo de capital riesgo gestionado por CLAVE CAPITAL que apoya la innovación del sector food invirtiendo en pruebas de concepto y startups del sector. La inversión se dirige a validar tecnologías y modelos de negocio con el objetivo de llevarlos a mercado o escalarlos para hacerlos más rentables. El fondo hasta la fecha ha invertido en compañías como HEURA, PINK ALBATROSS, SMILEAT, AGROSINGULARITY y ha aprobado la realización de 10 pruebas de concepto con centros tecnológicos y universidades. 

El fondo dispone de una base de inversión de 15 millones de euros y cuenta con 700 proyectos en análisis, en cuatro ámbitos, principalmente nuevas fuentes de proteínas sostenibles y alternativas (plant based y fermentación), digitalización del sector (inteligencia artificial, matching learning), mejora de procesos industriales (eficiencia de procesos) y mejoras en el packaging (reducción listeria, etc.), y personalización de la nutrición, adaptada a diferentes momentos y diferentes consumidores (social, local, reducción “food waste”, etc.).

El acceso a todo este conocimiento, analizado y validado, aporta muchas ventajas a las compañías. Los inversores que participan en Tech Transfer Agrifood obtienen tres ventajas, excelente visión sobre las innovaciones el sector y los principales actores que lo operan, accediendo a proyectos validados técnicamente y comercialmente que resuelven retos de mercado reales, capacidad de coinversión en las inversiones realizadas por el fondo y obtención de una rentabilidad financiera de la inversión del fondo.

Para las Pymes es una manera de aprender los modelos de inversión en startups y resolver retos de producto, proceso o mercado, obteniendo una rentabilidad por su dinero.

El sector Food Tech vive un momento de cambio: atraer buenos equipos, modelo de negocio y tener financiación para desarrollar el negocio marcarán la diferencia entre ganadores y perdedores. ¡Esto ya ha pasado en otros sectores, el pez rápido se come al lento!

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